Me dices que
crees ser el protagonista de mis letras,
y cuando te
lo confirmo, debido a que yo creo
que quien
escribe no es dueño de la palabra
sino quien
lo lee y la hace suya;
entonces,
manifiestas, que aún no conoces
los
fantasmas de la profundidad de mis mares;
¡cuidado! no
te acerques, no soy, no estoy, no existo,
soy un
espejo roto; y en él se refleja,
la soledad,
el silencio, que es la música callada del poeta,
el dolor, el
amor, la ilusión, la esperanza,
y a veces un
alma cansada, fracturada, casi muerta
luego dirás
como los demás
que con
el filo del espejo roto
y con el
fuego que habita en mis letras
estrujé tu corazón
sincero y que te lo arranque del pecho
dejándolo cual
soldado lesionado
en una campo
minado, y abandonado.
Sol cautivo
entre rejas de verbena,
ya te habrán
contado mis letras
que soy una
musa sin mesura, y para mí
escribir
versos es las pasión que me corre por las venas
y también porque creo que escribir, es mantener
una postura
aunque bien
sé que aquí críticos, sobran.
Asoreth
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